Parabrisas laminado
Los expertos aseguran que el parabrisas (también el parabrisas lamiando) es el elemento de seguridad de nuestros vehículos que más vidas ha salvado junto con el cinturón de seguridad. Este mismo año se cumplen 100 años desde que Ford lo introdujo en la mayoría de sus modelos. Quizás muchos no lo sepan, pero su éxito radica en que nos ofrece una protección que puede resquebrajarse pero que jamás se rompe en mil pedazos.
Historia del parabrisas laminado
Ford fué el primero que patentó estos parabrisas y además los incorporo en sus vehículos en el año 1921. Se compone de dos o tres láminas de cristal unidas por un capa de polímero transparente, de forma que al romperse, los cristales no salen despedidos porque se quedan adheridos a la hoja central. Al principio estaban formados sólo de dos láminas, con una resina intermedia. Posteriormente, en los años 60, salió el “triplex” que añadía una lámina más.
Pero hasta llegar a este sistema, la luna delantera del vehículo ha tenido una evolución constante. Los primeros coches eran coches de caballos a los que se sustituyó el animal por un motor, con lo cual, el conductor iba totalmente al aire libre, sin ningún tipo de protección, solamente utilizaban unas gafas que cerraban totalmente unas vez puestas y así se protegían de las piedras del camino y de los mosquitos.
Los primeros coches comenzaron a introducir cristales partidos como protección, pero eran muy peligrosos ya que eran cristales normales que al romperse en un accidente o choque se descomponían en multitud de fragmentos que salían despedidos hacia el conductor, provocándole numerosos cortes e incluso lo muerte. Por ello el parabrisas fué evolucionando hacia otros materiales.
La siguiente evolución consistió en pasar de cristales abatibles a cristales planos y fijos. Algunos fabricante todavía instalaban el cristal normal pero otros ya comenzaron a introducir el laminado, aumentando así la seguridad del conductor. Sobre los años 60, en Europa se impone la obligación de que todos los cristales sean laminados.
Ventajas del parabrisas laminado
Otra de las ventajas del parabrisas laminado es que se puede reparar. En el caso de que la rotura fuese demasiado grande como para poder repararlo, hay que sustituirlo.
El parabrisas laminado aporta una resistencia estructural al vehículo, protege del hundimiento del techo en caso de vuelco y evita que el airbag de acompañante pierda efectividad ya que se apoya sobre el parabrisas para proteger al acompañante en caso de accidente.
0 comentarios