Efectos del calor sobre la conducción de vehículos
En verano un coche parado y al sol se puede convertir en un auténtico horno. No debemos permanecer dentro del vehículo y desde luego no debemos dejar nunca dentro del coche ni a personas vulnerables ni a animales, ni siquiera un minuto. Es importante conocer y prevenir los efectos del calor sobre la conducción de vehículos.
El calor extremo además puede afectarnos en la conducción; por eso debemos estar muy atentos por si aparece algún síntoma e hidratarnos mucho. Si tenemos en cuenta, por ejemplo, 39 grados de temperatura, que es una temperatura normal en países mediterráneos, en tan solo 15 minutos el interior del vehículo estaría ya a unos 65 grados de temperatura. Eso es incompatible con estar dentro, con conducir o con cualquier actividad.
Golpe de calor
Un golpe de calor es una alteración en la regulación de la temperatura corporal habitual. Nuestra temperatura corporal habitual está en torno a 37 grados. Si estamos expuestos a temperaturas elevadas, puede elevarse a cifras, sobre todo empezando a ser peligroso por encima de 40-41 grados centígrados. Los golpes de calor son peligrosos sobre todo en personas vulnerables, como son los niños pequeños, personas de edad avanzada, personas con enfermedades crónicas; empiezan a perder el mecanismo de regulación habitual, la circulación va disminuyendo, puede haber episodios de pérdida de consciencia, alteraciones cardíacas, y eso, si no se corrige a tiempo, puede dar lugar a una muerte o fallecimiento.
Este golpe de calor puede influir seriamente en la conducción, por eso es muy importante prestar atención a una serie de síntomas. Vamos conduciendo y empezamos a notar sensación de mareo, estamos irritables, dolor de cabeza, alteraciones visuales; intentamos buscar un lugar seguro para aparcar el coche lo primero. Cuando estemos en una zona segura, hidratación, ¿vale? Fundamental. Y si tenemos hielo o alguna bebida que esté fría, lo podemos colocar en la zona del cuello, en las axilas y luego en las ingles… Para ayudar a favorecer con esas medidas físicas el enfriamiento corporal. Y si vemos que pasan unos minutos y seguimos con esa sensación, hay más debilidad generalizada, empezamos a quedarnos dormidos; es fundamental buscar ayuda para esa hidratación darla por vía intravenosa.
Trucos para enfriar el coche
Lo ideal es que en el vehículo nunca haga demasiado calor; por eso podemos usar unos pequeños trucos para enfriar rápidamente el coche.
- Antes de nada procedemos a bajar la ventanilla trasera.
- Y posteriormente abrimos la puerta del otro lado del vehículo. Y damos tres portazos… Y con esto reducimos en unos pocos grados la temperatura del interior del habitáculo.
- Posteriormente bajaríamos las ventanillas
- y, si tenemos aire acondicionado, lo pondríamos en funcionamiento al máximo y esperaríamos en el exterior a que bajara la temperatura.
- Una vez que tenemos la temperatura adecuada, entramos en el coche e iniciamos la marcha.
Vídeo y texto extraídos del programa Seguridad Vital
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