Niños y calor
- Transporte seguro de menores en vehículos
- 39-Normas generales sobre paradas y estacionamientos. Teto Refundido de la Ley de Tráfico
Uno de los incidentes más sobrecogedores que podemos conocer es que menores en interior de vehículos con calor han fallecido por despiste de sus padres que los dejaron olvidados. Niños, coche y mucho calor pueden llegar a ser, por desgracia, una combinación mortal. Por eso tan importante regular la temperatura del habitáculo, debemos tener en cuenta que, el cuerpo de los menores, genera más calor que el de los adultos y que a los niños les cuesta liberar esa temperatura. Si vamos a viajar con un menor, es esencial que sigamos una serie de consejos.
Un golpe de calor es una situación que pueden sufrir niños que están expuestos a altas temperaturas. Cuando un niño alcanza una temperatura corporal mayor de 40º empiezan a aparecer síntomas como:
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- Disminución del nivel de consciencia
- A veces convulsiones
- Dolores de cabeza
- Náuseas y vómitos
- Pulso acelerado
Los niños, sobre todo los menores de 5 años y especialmente los menores de 1, tienen más riesgo de sufrir un golpe de calor por:
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- Su superficie corporal es, proporcionalmente, mayor que la de un adulto
- Sus mecanismos de control de la temperatura son más inmaduros
- Y, sobre todo, porque dependen de un adulto para estar adecuadamente hidratados
Consejos para evitar golpes de calor a los niños
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- Lo primero que se debe hacer, antes de iniciar la marcha, es comprobar la temperatura del interior del vehículo. Si hace mucho calor, es conveniente, antes de entrar a él, ventilarlo.
- Es siempre recomendable iniciar los viajes a primera hora de la mañana porque hace menos calor
- Podría ser recomendable utilizar unas fundas que cubren todo el sistema de retención infantil, de forma que evitan que se recalienten y se puedan quemar.
- Cuando iniciamos la marcha, se puede poner el aire acondicionado, pero a una temperatura agradable, entre 21 y 23º.
- Los niños deben viajar con ropa muy cómoda, transpirable, de algodón, si es posible.
- Dar de beber agua a los niños muy a menudo durante el viaje para que no se deshidraten, aunque no la pidan.
- Una vez finalizado el viaje, revisar todos los asientos para asegurarnos que no olvidamos a los pequeños dentro. Para ello existen también una serie de aplicaciones y dispositivos que avisan de estas situaciones. Estos dispositivos se acoplan por encima del SRI, lleva un sensor de peso que está conectado a una aplicación. En el momento que nos alejamos del vehículo, automáticamente recibimos un aviso acústico y otro visual.
Qué hacer si un niño se ha quedado olvidado en un vehículo
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- Si en alguna ocasión nos encontramos con un niño que ha sido olvidado en un coche, lo primero que se debe hacer es comprobar si está consciente.
- Llamaremos al 112
- Lo colocaremos en una zona a la sombra y bien ventilada boca arriba o de lado
- Le podemos colocar paños húmedos sobre el cuerpo
- Se le puede ofrecer líquidos si está consciente
- Aflojarle también la ropa para ayudar a que pierda esa temperatura
Texto y vídeo obtenidos del programa Seguridad Vital
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