Responsabilidades del conductor de animales en carreteras: normativa
La presencia de animales en las carreteras puede generar desafíos tanto para los conductores de vehículos motorizados como para aquellos responsables del manejo de los animales. Las normas establecidas en el Reglamento General de Circulación (Artículo 126) están diseñadas para garantizar la seguridad de todos los usuarios de las vías, reconociendo la necesidad de una regulación específica cuando los animales están implicados en la circulación vial. En este artículo te explicamos la normativa sobre la circulación de animales en carreteras y cuál es la responsabilidad de los conductores de los animales.
Definición de conductor de animales
El Anexo de la Ley de Seguridad Vial define a una persona a cuyo cargo están uno o varios animales como **conductor de animales**. Este término incluye tanto a quienes conducen animales de tiro, carga o silla, como a los que se encargan de ganado aislado, en manadas o rebaños. En contraste, aquellos que pasean animales de compañía, como perros o gatos, se consideran peatones y, por lo tanto, están sujetos a la normativa general de los peatones.
Normas generales para la circulación de animales
El artículo 126 del Reglamento General de Circulación establece las directrices para la circulación de animales, ya sean de tiro, carga, silla, o ganado en manada. Entre los puntos más relevantes se destacan los siguientes:
- Responsabilidad del conductor de animales. Toda persona a cargo de animales debe ser mayor de 18 años y tener la capacidad de dominarlos en todo momento. Esto es fundamental para evitar situaciones de riesgo en la vía.
- Zona de la vía que pueden ocupar. Los animales no deben invadir zonas peatonales. En el caso de los animales de tiro o carga, estos deben circular preferentemente por el arcén derecho y, en caso de utilizar la calzada, mantenerse lo más cerca posible del borde derecho. Excepcionalmente, por razones de seguridad, uno solo de estos animales puede circular por el borde izquierdo.
- Circulación en manada. Los animales que se desplacen en manada deben hacerlo al paso, ocupando únicamente la mitad derecha de la calzada. Las manadas deben estar divididas en grupos moderados, con un conductor por cada grupo y manteniendo una separación suficiente entre ellos para no obstaculizar el tráfico.
Cruce de animales por la vía
Uno de los momentos más delicados en la circulación de animales es el cruce de carreteras. El Reglamento establece que los animales solo pueden cruzar por pasos autorizados y señalizados denominados cañadas. En su defecto, deben hacerlo por zonas que ofrezcan las condiciones de seguridad adecuadas. En caso de encontrarse con otro rebaño en sentido contrario, los conductores deben tomar las precauciones necesarias para que el cruce se realice de manera rápida y segura.
Obligación de vigilancia
En cuanto a la obligación de vigilancia, el número 2 del artículo 127 establece claramente y de forma terminante la prohibición de dejar animales sin custodia en cualquier clase de vía.
Normas específicas en situaciones de baja visibilidad
En condiciones de poca visibilidad, como la noche o cuando las condiciones meteorológicas lo requieren, el conductor de animales debe asegurarse de que los animales sean visibles para los demás usuarios de la vía. Esto se consigue mediante el uso de luces, colocadas en el lado más cercano al centro de la calzada, con una luz blanca o amarilla hacia adelante y roja hacia atrás, que indique claramente la posición y dimensiones de los animales.
Prohibiciones en autopistas y autovías
El Reglamento es claro en la prohibición de la circulación de animales en autopistas y autovías. Estas vías están diseñadas para el tráfico de vehículos motorizados a alta velocidad, lo que representa un riesgo significativo tanto para los animales como para los conductores en caso de una eventual colisión.
Señales de advertencia relacionadas con animales
Existen diversas señales viales que advierten a los conductores sobre la posible presencia de animales en la vía. Algunas de las más comunes incluyen:
– P-23: Paso de animales domésticos. Indica el peligro de que la vía pueda ser atravesada frecuentemente por animales domésticos.
– P-24: Paso de animales en libertad. Señala el riesgo de encontrar animales en libertad cruzando la carretera.
– R-117: Entrada prohibida a animales de montura. Prohíbe el acceso a la vía a animales de montura.
– R-409: Camino reservado para animales de montura. Obliga a los jinetes a utilizar caminos designados específicamente para animales de montura y prohíbe su uso a otros usuarios.
Estas señales son esenciales para advertir a los conductores y evitar accidentes. La colocación de estas señales en zonas rurales o donde haya una gran presencia de animales es crucial para prevenir incidentes.
Velocidad y distancia de seguridad
En cuanto a la velocidad de los animales en la vía, el Reglamento establece que deben desplazarse al paso. Además, en el caso de los vehículos que deseen adelantar a animales fuera de poblado, deben mantener una separación lateral mínima de 1,5 metros. Dentro de poblado, aunque no se indica una distancia específica, se requiere que el conductor mantenga un margen de seguridad proporcional a la velocidad y a las características de la calzada.
Bebidas alcohólicas
Las tasas máximas permitidas de alcohol en sangre, según el artículo 20 del Reglamento de Circulación, se aplican a los conductores de vehículos, pero no a los conductores de animales. Sin embargo, todos los conductores, incluidos los de animales, deben someterse a pruebas de alcoholemia si están involucrados en un accidente de tráfico o han cometido una infracción. Además, también deben someterse a pruebas para detectar sustancias estupefacientes, según el artículo 28.
Consideraciones finales
En resumen, la circulación de animales en carreteras requiere de una atención especial. Además debemos cumplir unas normas específicas para garantizar la seguridad tanto de los animales como de los conductores. Al igual que otros usuarios que pueden interferir con el tráfico, se busca que los animales utilicen vías reservadas o, en su defecto, el arcén, y solo en último caso, la calzada. Estas normativas reflejan la importancia de compartir las vías de manera segura y respetuosa con todos los usuarios, incluidas las personas que trabajan con ganado o animales de tiro .
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