Los procesos perceptivos en la conducción

Procesos perceptivos durante la conducción. Percepción visual

Los procesos perceptivos nos permiten captar mediante los órganos sensoriales (Vista y oído principalmente) e interpretar la Información que existe en el entorno de tráfico. Estos procesos tienen una importancia capital en la conducción, hasta tal punto que se ha llegado a afirmar que los errores perceptivos se hallan implicados, de un modo u otro modo, en casi la mitad de los accidentes debidos al fallo humano.

Los errores perceptivos originan muchos más accidentes que los errores derivados de una mala ejecución de las maniobras.

Para desplazarse con seguridad, el conductor debe ajustar sus acciones al flujo constante de estimulación vial que llega a sus sentidos, informándole y dándole pistas de aspectos tan importantes como el grado de alineamiento con la carretera, la distancia respecto a los vehículos que le siguen o anteceden, la presencia de tramos curvos, etc. En pocas palabras, conducir implica valerse de la percepción para ajustarse a las características cambiantes del entorno en el que se produce el desplazamiento.

Aunque todos los sentidos intervienen de alguna manera en este proceso, corresponde al sistema visual el papel más importante, ya que más del 80% de la información que vamos a utilizar en la toma de decisiones en la conducción viene por esta vía. La percepción táctil y el sistema vestibular informan al conductor sobre la existencia de cambios en la velocidad inclinación y dirección del vehículo. Sin embargo, esto no le permitirá anticiparse a ellos, algo en lo que sí le ayudará la información proporcionada por la vista.

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Por otro lado. la percepción auditiva permite al conductor obtener información en en situaciones en las  cuales el vehículo está sometido a vibraciones y ruidos importantes. En superficies estáticas, esenciales en la regulación de la conducción, es sistema auditivo no puede proporcionarnos mucha información. Por el contrario, mediante la visión podemos tener Información sobre superficies alejadas y también nos proporciona datos de superficies carentes de vibraciones. Por todo ello, el sistema visual es, en definitiva, el que proporciona una información más completa para la conducción y, además, es el único que permite integrar las aportaciones de la totalidad de los sentidos relacionados con esta tarea.

La percepción visual implica, en primer término. una actividad exploratoria, que dirige los movimientos de la mirada por las distintas zonas del entorno y selecciona los elementos que definen la situación. Esta
actividad se produce gracias a que el ser humano posee la facultad de cambiar rápidamente de una información visual a otra, procesándola en reducidos intervalos de tiempo.

Deterioro de la percepción visual

Sin embargo, esta facultad puede verse mermada o alterada con cierta facilidad, ya que los mecanismos que utiliza el conductor para realizar este proceso visual varían en función de diversos factores implicados
en la situación de conducción, tales como: las propiedades físicas de los estímulos (luminosidad, visibilidad, tipo de vía, etc.), las exigencias de la tarea (trayectoria recta o maniobra de giro. distancias, tiempo, velocidad. espacio, etc.) y los factores característicos del sujeto (edad y estados psicofisiológicos transitorios, tales como el sueño, la fatiga, la ingestión de drogas, fármacos o alcohol, entre otros,)

En todo caso, las principales consecuencias de un deterioro en la capacidad visual del sujeto podrían suponer, entre otras, las siguientes alteraciones, que en muchos casos son la antesala del accidente:

• Incremento del tiempo de reacción ante las señales, los obstáculos o los peatones.
• Realizar un mayor esfuerzo en la interpretación de las situaciones, con el consiguiente aumento de la fatiga.
• Acumulación de tensión física y mental.
• En determinados casos, confusión en la percepción de los colores rojo y verde de la señalización luminosa.
• Interpretación incorrecta de las indicaciones o señales realizadas por otros usuarios
• Dificultades para adaptarse de manera adecuada a condiciones de luminosidad variable (deslumbramientos, atardecer, amanecer, noche, etc.).

Algunos conceptos importantes, que veremos en post posteriores, y que están relacionados con la utilización de la vista durante la conducción son:

• Agudeza visual, deslumbramientos y visión para el color
• El campo visual y la visión periférica
• La percepción del movimiento y de la velocidad
• La percepción del espacio y el tiempo
• La percepción de la profundidad
• Percepción y señalización