Como mejorar la eficiencia energética en el sector del transporte

Existen tres ejes principales de actuación para mejorar la eficiencia energética en el transporte. Toda actuación a desarrollar puede englobarse en alguna de estas tres líneas, que se muestran en la siguiente gráfica:

Eficiencia energética en el transporte

1. Cambio modal a modos más eficientes de transporte

Podemos decir que esta línea de actuación es clave para mejorar la eficiencia energética en el sector del transporte, ya que es el sector con mayor potencial de ahorro energético y mayor impacto en el transporte sostenible. Esta medida promueve la transición de vehículos turismos de baja ocupación a modos de transporte más eficientes, especialmente el transporte público colectivo.

En este sentido, cabe destacar el Programa de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), que ofrece soluciones integradas de transporte de una forma más eficiente, y el Programa de Transporte de Centros de Trabajo y Actividades (PTT), que las entidades y empresas promocionan entre sus empleados y visitantes. Cabe señalar que las medidas implantadas en los planes de movilidad y transporte de estas empresas están integradas e incluidas en el planteamiento previo acordado y aprobado por los distintos organismos implicados.

En el marco de este conjunto de medidas, también se potencia el tráfico de transporte público (autobuses) y ferroviario (metro, metro ligero y cercanías) en las áreas metropolitanas, así como en las de media y larga distancia. También se promueve el transporte marítimo de corta distancia para mercancías (short sea shipping), por su alta eficiencia energética.

2. Mejora de la eficiencia de los medios de transporte

Una vez que se complete el cambio de paradigma hacia modos de transporte más eficientes, este bloque contribuirá a mejorar la eficiencia energética de cada modo de transporte.

El objetivo principal de este bloque es la renovación de las flotas de automóviles. Aquí se incluye tanto el transporte por carretera,  como el transporte marítimo y ferroviario. En el transporte metropolitano, cobra especial interés la renovación del parque de vehículos. En este sentido se incluyen los vehículos de pasajeros y comerciales, así como los vehículos pesados ​​destinados a la prestación de servicios de transporte.

Dentro de este marco, la introducción de vehículos de energías alternativas es fundamental para aumentar la sostenibilidad de este sector. En este sentido destaca la electrificación del drive-train, es decir, cuando se introducen las tecnologías mild hybrid (start-up.-stop) y los híbridos (full hybrids y mild hybrids). Ya estamos en la etapa de introducción de los coches eléctricos, ya sea con apoyo térmico a la tracción del vehículo (PHEV plug- hybrid) o apoyo térmico a la recarga de la batería en vehículos (EREV  vehículos eléctricos con autonomía extendida o vehículos puramente eléctricos BEV). Además de la electrificación de la flota, las fuentes de energía alternativa incluyen vehículos de “combustible dual” que funcionan con gasolina y gas natural o gas licuado de petróleo (GLP).

Finalmente, el hidrógeno en mezclas de combustible también se está considerando como una fuente de energía alternativa, especialmente a través de pilas de combustible.

3. Uso más eficiente de los modos de transporte

Después de todo, una vez que hemos impulsado e implementado el cambio modal y mejorado la eficiencia energética de los modos de transporte asociados, solo es cuestión de utilizar el modo de transporte de la manera más eficiente.

En esta área, el principal objetivo es la conducción eficiente de los vehículos, ya sea por carretera, mar o ferrocarril. En el transporte por carretera, tanto con turismos como con camiones ligeros, el ahorro de energía es del 15%. Para los vehículos industriales pesados, incluidos camiones y autobuses, el potencial de ahorro de energía es menor, alrededor del 10 %. Sin embargo, el impacto relativo en el automóvil es mayor debido al mayor consumo de energía.

Otra medida que ha tenido un impacto significativo es la gestión eficiente de las flotas de transporte de vehículos. Esto permite un importante ahorro de consumo y combustible en la operación de la flota.

Por último, también en el mismo bloque, se incluyen eventos de vehículos compartidos (car sharing, motos, scooter sharing, scooters, bicicletas… y viajes compartidos (pooling). No cabe duda de que la economía colaborativa y las nuevas tecnologías están cambiando nuestros hábitos de propiedad y uso compartido del vehículo. Ello también está impulsando un mayor uso del transporte público.